20.6.06

Introducción

Quiero empezar por rendir homenaje a aquellas mujeres, a veces calladamente, que con su "audacia" y perseverancia hicieron posible que una sociedad como la masonería fuera aceptando poco a poco la presencia femenina en sus Logias, un día prohibidas a las mujeres.

Hoy por hoy sólo quedan cerradas a las mujeres las puertas de la masonería llamada "conservadora" o "regular.

A menudo me he preguntado, como hiciera Gerda Lerner, una especialista activa de la Historia de las mujeres, cómo sería la historia si la vieran los ojos de las mujeres, si la ordenaran los valores que ellas definen, puesto que la historia ha sido escrita por y para hombres, en todo caso nunca desde la perspectiva de la propia mujer.

La primera mujer y masona que ha intentado recuperar la historia de la masonería femenina en España, fue Libertad Morte, que en el verano de 1989 moría en la ciudad francesa de París.

Ella hija de exilados españoles intentó recuperar los orígenes de la masonería femenina en nuestro país.

Actualmente numerosos estudiosos del tema se han ocupado de logias, en concreto o de poblaciones, en las que la mujer, como en otros campos de la sociedad participó.

Mi introducción intentará justificar el porqué en su día las constituciones de Anderson llegaron a la conclusión de que las mujeres no podían ingresar en la masonería.

Haremos un repaso de las diferentes obediencias femeninas o mixtas existentes actualmente o que hayan funcionado en algún momento de la historia para finalmente recorrer la situación de la masonería en nuestro país desde sus inicios así como la incorporación de mujeres en los talleres, ya masculinos, ya de adopción, y dejar constancia de las mujeres que más se han significado en la lucha por la consecución de la igualdad de derechos.

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